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Lo hemos visto en películas como A. I. Inteligencia Artificial, Yo, robot, Her; o las más recientes BigBug o las últimas de la saga Terminator. Hay muchos ejemplos de ficciones en que las Inteligencias Artificiales se rebelan o toman de algún modo el control. En las menos preocupantes, son simplemente fallos de sistema, en las más, cobran autoconciencia y llegan a atacarnos. ¿Va la Inteligencia Artificial Generativa a acabar con el mundo tal y como lo conocemos y hacerlo parecido a una distopía? ¿Acabará, a corto plazo, con puestos de trabajo? Te contamos cuáles son los peligros de la Inteligencia Artificial Generativa.

 

CONTENIDOS

¿Qué es la Inteligencia Artificial Generativa?

¿Qué puede hacer la Inteligencia Artificial Generativa?

¿Cuáles son los peligros de la IA Generativa?

1. La desinformación en la sociedad

2. Gasto de recursos naturales

3. Expansión de la IA sin regulación

4. Reorganización del mercado de trabajo

¿Qué podemos esperar los próximos años?

IA generativa

¿Qué es la Inteligencia Artificial Generativa?

Es una rama de la IA dentro del Machine Learning que se enofca en la generación de contenido original a partir de datos existentes. Utiliza algoritmos y redes neuronales avanzadas para aprender de textos e imágenes y luego generar contenido nuevo y único.
Lo característico de los últimos años es que este tipo de tecnología está creando textos, imágenes y vídeos, a partir de instrucciones de usuarios, prácticamente indistinguibles de los generados por seres humanos a partir de la realidad (p.e. fotos o vídeos reales o textos académicos).

¿Qué puede hacer la Inteligencia Artificial Generativa?

Lo que más ha saltado a la opinión pública son las espectaculares imágenes creadas, por Stable Diffussion o MidJourney, pero lo cierto es que la IA Generativa no se limita a generar contenidos asociados a la creación artística o ficcional. La IA Generativa crea también código o incluso contribuyen a generar programas enteros. Así, algunas de sus aplicaciones son los bots de terapia, los programas para generar textos de todo tipo a partir de instrucciones (como chatGPT),  o para ayudar a los programadores con sus tareas.

Para decirlo de forma sencilla, la IA Generativa crea textos, imágenes, voz, vídeos y código a partir de una ingente cantidad de contenido indexado, mediante algoritmos y redes neuronales avanzadas.

Space Opera Theatre

“Space opera Theatre” creada por Jason Allen con Midjourney, ganadora de un concurso de arte

Algunos de los programas que son cada vez más conocidos desde 2021 son:

  • MidJourney (del laboratorio independiente del mismo nombre): Aplicación para crear imágenes a partir de textos.
  • DALL-E (de Open AI): Otra aplicación que genera imágenes a partir de instrucciones verbales.
  • Stable Diffussion (de Stability AI): Hace exactamente lo mismo.
  • ChatGPT (de Open AI): Chatbot de IA especializado en lenguaje natural, mediante Machine Learning a partir de inmensas fuentes de datos.
  • Bard (de Alphabet): El Chatbot de Google competencia de ChatGPT, aún no se ha lanzado.
  • Canva Magic Write (de Word Inc.) : Programa basado en IA especializado en generar textos persuasivos y creativos.
  • Git Hub Copilot: Programa basado en IA para generar código siguiendo instrucciones de desarrolladores. Puede hacer hasta el 40% del código de una solución.

¿Cuáles son los peligros de la Inteligencia Artificial Generativa?

Últimamente han saltado a primer plano los peligros de la Inteligencia Artificial Generativa:

1. La desinformación en la sociedad

Según Emad Moustaque, CEO de Stability AI, “en los próximos cinco a diez años podremos crear cualquier cosa que puedas imaginar con una calidad visual perfecta en tiempo real.” No solo eso, la mayoría de los desarrolladores afirman que serán indistinguibles de las reales. Los vídeos generados por IA serán iguales que  los tomados con una cámara, y lo mismo sucederá con las imágenes.

Las consecuencias son evidentes. Si ya nos cuesta distinguir las noticias falsas, en un mundo plagado de DeepFake Vídeos , como esta popular imitación de Tom Cruise, será aun más difícil.

Los deepfakes serán una fuente de desinformación al alcance de casi cualquiera (no como ahora, que solo pueden generarlos los expertos).
En lo que respecta a las IA generadoras de textos, las herramientas de IA, sin control, pueden reproducir sesgos como los de los humanos, y caer en racismo, machismo o cualquier otra discriminación, como el triste caso de Tay, el bot conversacional basado en IA lanzado por Microsoft en 2016.

2. Gasto de recursos naturales

Por una parte, no es lo suficientemente conocido que para que funcione la IA es necesario un gasto de energía ingente.  La IA de Google consume entre el  10% y el 15% de la energía total del gigante tecnológico, es decir, unos 2,3 teravatios. Para que nos entendamos, solo un poco inferior al gasto energético de la población de la Comunidad de Madrid en un año. ChatGPT precisa para su funcionamiento de 1.287 GW/h, el consumo medio de 120 hogares europeos durante un año.

Eso si contar el gasto de fuerza de trabajo de millones de personas para corregir y comprobar los sistemas a diario y evitar, por ejemplo, los sesgos de los que hablamos en el punto anterior.

peligros de la inteligencia artificial generativa

3. Expansión de la IA sin regulación

No se puede esperar que, en menos de diez años, la regulación alcance a controlar todos los posibles usos perniciosos de la IA. Solo algunos ejemplos son:
• Difusión de contenidos falsos por internet que potencian la desinformación.
• Problemas de autoría derivados generar contenidos creativos a partir de obras de creadores humanos.
• Control de la población y pérdida de libertades mediante programas de reconocimiento facial o reconocimiento de voz basados en IA.
• Simulación de identidades falsas mediante programas que generen imágenes o vídeos con rostros y voces de personas existentes.
• Dificultades para aceptar pruebas documentales en el derecho procesal, por la mayor facilidad para falsearlas.

4. Reorganización del Mercado de trabajo

La cantidad de cosas que las IA ya hacen mejor que los seres humanos van aumentado, como muestra esta gráfica.

Puntuacion IA comparada con rendimiento humano

FUENTE: https://www.newtral.es/

Tareas como la comprensión lectora o lingüística  -imprescindible para la traducción, por ejemplo- algunos de los últimos ámbitos de competencia superior de la mente humana, van cayendo una tras otra.
Esto podría generar una reorganización de las empresas e incluso el mercado de trabajo, y podría ser causa de desajustes en las carreras laborales de muchas personas.  Hay quien considera este uno mas de los peligros de la Inteligencia Artificial Generativa, pero no está claro. La Revolución Industrial destruyó muchos tipos de trabajos, pero también creó otros.  Por otra parte, la evolución es tan rápida que aún no se sabe.

¿Qué podemos esperar los próximos  años?

Las empresas están cada vez más interesadas en invertir en IA. En 2021 la inversión fue de 270.000 millones y en la última década se ha multiplicado por 13. Esta inversión no carece de lógica. La IA aportará en 7 años 157 billones de dólares a la economía mundial.

Paralelamente, la AIAAIC (AI Algorithmic and Automation Incidents and Controversies) ha registrado cada vez más incidentes. En 2022 registró 72, es decir, siete veces más que diez años antes.  Como es lógico, la mayor inversión y surgimiento de nuevas herramientas basadas en IA multiplican los conflictos y los incidentes.

Las leyes sobre la IA se han multiplicado los últimos años, pero sobre todo en EEUU, como vemos en la siguiente gráfica:

leyes sobre IA a lo largo de los años

FUENTE: https://www.newtral.es/

Pero parece claro que los órganos reguladores nacionales e internacionales no llegarán a tiempo para frenar las consecuencias negativas para los seres humanos. Como ya sucedió con las Redes Sociales, sus perniciosos efectos sobre las personas –y sobre todo sobre los adolescentes– no se entendieron, ni regularon, hasta mucho más tarde de su auge y mayor difusión.

Dado que la regulación no llegará a tiempo, será importante el papel de organismos como el instituto AI Now, que investiga la concentración de poder en las industrias tecnológicas, o la International Fact-Checking Network (IFCN), que agrupa 120 miembros asociados (en su mayoría empresas de verificación de noticias)  que luchan contra la desinformación.

En definitiva, la IA en general puede generar mucho beneficio y, como es lógico, las empresas se van a volcar en ella, pero eso no puede impedirnos ver los peligros de la Inteligencia Artificial Generativa.  Tanto los organismos púbicos como las organizaciones privadas deben hacer frente cuanto antes a este importante desafío.

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